| Olimpia | Maqueta del Santuario de Olimpia | Museo Arqueológico de Olimpia | Hermes de Praxíteles | Templo de Zeus | Estatua de Zeus Olímpico |
En Grecia se celebraban cuatro festivales en los que la participación estaba abierta a todos los griegos:
- Juegos Olímpicos, en honor de Zeus, se celebraban cada cuatro años en Olimpia.
- Juegos Píticos, en honor de Apolo, se celebraban cada cuatro años en Delfos.
- Juegos Nemeicos, en Nemea, en honor de la hazaña realizada por Heracles (Hércules) que dio muerte al león de Nemea.
- Juegos Ístmicos, en el Istmo de Corinto, en honor de Poseidón.
Los juegos panhelénicos más importantes eran los Olímpicos, que se celebraban en Olimpia cada cuatro años, en verano (este periodo de cuatro años se denominaba Olimpiada). En 776 a.C. comenzó a hacerse la lista de los ganadores y se considera ésta la fecha de iniciación de los juegos. Al parecer, la idea original partió del rey Oxilos (hacia el 1100 a.C.), aunque los juegos empezaron a celebrarse por iniciativa del rey Ífitos de Élida, después de que éste llegara a un acuerdo con sus rivales, Licurgo rey de Esparta y Clístenes rey de Pisa, para garantizar la paz durante el evento. Según cuenta la tradición, el texto del tratado fue escrito en un disco de piedra y guardado en el templo de Hera. Para los primeros juegos Ifitos organizó una carrera de 192,27 metros, distancia que equivale exactamente a la medida griega de un estadio.
Estas pruebas se celebraban cada cuatro años, duraban un solo día y siempre coincidían con la primera luna llena después del solsticio de verano (finales de julio, principios de agosto).
Entre los siglos VII y V a.C., esta manifestación deportiva se fue consolidando y para el año 472 contaba entre sus participantes con ciudadanos de las zonas circundantes de la Élida (Arcadia, Laconia, Argólida, Acaia y Mesenia).
En la época clásica, los juegos duraban cinco días (uno de los días estaba dedicado íntegramente a celebrar ritos y sacrificios religiosos en honor a Zeus) y los ganadores de las pruebas recibían como único premio una corona de ramas de olivo («kotinos»), aunque los atletas vencedores eran considerados como héroes por su propia ciudad y recibían ayudas económicas de los nobles. Con el tiempo, el laurel sustituyó al olivo, aunque la costumbre de la corona vegetal permaneció hasta 1960, año en que se introdujeron las medallas de oro, plata y bronce.
En los juegos antiguos las modalidades deportivas eran: Pentatlón, Carreras, Boxeo, Carreras de carro, Equitación y Pancracio que era una mezcla de boxeo y lucha. La última prueba de los Juegos, considerada la más importante, era denominada «final del estadio» y consistía en correr un estadio (192,27 metros). Se sabe que uno de los primeros ganadores de esta prueba se llamaba Corebo y era cocinero de la ciudad de Elis.
El Pentatlón se agregó en los XVIII Juegos y consistía en un conjunto de cinco pruebas que comenzaba con el salto de longitud; los que superaban la marca mínima exigida pasaban al lanzamiento de la jabalina con lanza de 1,50 metros; los cuatro primeros clasificados corrían un estadio; los tres primeros calificados en la carrera pasaban al lanzamiento del disco y finalmente los dos mejores atletas decidían la victoria enfrentándose en la lucha.
Los últimos Juegos Olímpicos de la antigüedad se celebraron en el año 394 d.C. El emperador romano Teodosio decretó posteriormente la suspensión de los juegos. El 424 d.C. Teodosio II ratificó la suspensión.
Los primeros Juegos Olímpicos Modernos se celebraron en Atenas en 1896 organizados por el barón Pierre de Coubertin.
Durante la celebración de los Juegos se establecía la «ekekheiria» o tregua olímpica que implicaba la paralización de todos los conflictos bélicos desde una semana antes de los Juegos hasta una semana después. Un año antes del comienzo de los Juegos se enviaban mensajeros («spondofori») o portadores de la tregua por todos los rincones de Grecia y a todas las colonias griegas del Mediterráneo para anunciar la fecha de apertura de los Juegos y el periodo de la tregua olímpica.
Los ganadores de los Juegos recibían como único premio una corona («kotinos») elaborada con ramas de olivo que se cortaban de un olivo silvestre («calistéfanos»), según la mitología, plantado por Heracles (Hércules) junto al templo de Zeus en Olimpia. Posteriormente se sustituyó por laurel.
Estos atletas se convertían en héroes, otorgaban fama a sus ciudades, los poetas glosaban sus hazañas, se levantaban estatuas en su honor, estaban exentos de impuestos y vivían el resto de su vida sin trabajar recibiendo manutención gratuita y ayudas económicas de los dirigentes y mecenas de su ciudad de origen.
Los atletas olímpicos competían completamente desnudos, untados con aceite de oliva. No había equipos, cada uno participaba a título individual, aunque representando a su ciudad. Para poder competir se requería ser ciudadano griego y no haber cometido ningún crimen o delito.
Filipo, rey de Macedonia, ganó una de las pruebas hípicas de los Juegos del 356 a. C. el mismo año que nació su hijo Alejandro Magno.
El emperador Nerón deseaba ardientemente ser coronado con el «cotinus» de campeón olímpico, para ello participó en la carrera de cuadrigas de los Juegos del año 67 d. C. en la que competían carros tirados por cuatro caballos. Para asegurar su victoria se presentó en el hipódromo con un carro tirado por diez caballos. Todos sus competidores se retiraron indignados. Nerón corrió solo y aún así estuvo a punto de no ganar la prueba porque se cayó dos veces del carro.
Los Juegos Olímpicos modernos comenzaron en el siglo XIX gracias a los esfuerzos del francés Pierre Frèdy, barón de Coubertin, que fundó el Comité Olímpico Internacional (COI) en 1894.
La primera edición de los Juegos Olímpicos de la era moderna tuvo lugar en Atenas (Grecia) en 1896. Desde entonces se han venido realizando cada cuatro años en diversas ciudades del mundo, con excepción de los años 1916, 1940 y 1944, debido a las Guerras Mundiales. Los Juegos de 2020 se postergaron a 2021 debido a la pandemia de COVID-19.
«Citius, Altius, Fortius»
Más rápido, más alto, más fuerte.
«Kalos kagathós»
Hermoso y bueno.
(para los griegos el hombre perfecto era el que, además de virtudes morales, poseía belleza y salud física)
En los Juegos Olímpicos de Londres, el Barón Pierre de Coubertin pronunció una frase que quedó en la historia de los Juegos:
«Lo importante no es ganar sino participar»
La Bandera Olímpica fue diseñada por el Barón Pierre de Coubertín en 1913 y se utilizó por primera vez en los Juegos de París en 1914.
Se compone de cinco aros de colores entrelazados (tres arriba y dos abajo) sobre un fondo blanco, sin orla.
Los aros representan los cinco continentes unidos. Cada color simboliza un continente distinto. El azul representa a Europa, el negro a África, el rojo a América, el amarillo a Asia y el verde a Oceanía.
Las olimpiadas son el periodo de cuatro años que separa unos Juegos de otros y en cada olimpiada se distinguía el I, II, III y IV año. Tanta importancia tenían los Juegos en la vida de los griegos que utilizaban las olimpiadas como referencia cronológica. Por ejemplo, la batalla de Maratón tuvo lugar el III año de la LXXII olimpiada (año 490 a.C.).
En los Juegos de Olimpia el fuego era encendido en el altar de cenizas de Zeus por el vencedor de la primera prueba de pentatlón. Actualmente la llama Olímpica se enciende en el estadio de Olimpia unos meses antes de los Juegos Olímpicos por medio de un espejo cóncavo que concentra los rayos del sol sobre una antorcha de plata y es transportada, mediante antorchas, por atletas de todas las nacionalidades hasta la ciudad que acoge los Juegos.
En los Juegos de 2008, celebrados en Beijing, la llama olímpica pasó por los cinco continentes y recorrió la ruta más larga de la historia, 137.000 kilómetros, en ciento treinta días.