La colección de bronces antiguos que se exhibe en el Museo Arquológico de Olimpia es la más importante del mundo.
La mayoría de piezas pertenecen a los periodos geométrico y arcaico (siglos X y VI a. C.) y son armas, escudos, cascos, grebas, lebes (calderos), trípodes, figuras humanas y de animales y placas decoradas.
Casi todas las figuras humanas representan a Zeus o a Hera y las de animales son de caballos o toros.
Las placas de bronce recubrían escudos u objetos de madera ya desaparecidos como cofres o puertas.
Entre las placas destacan un grifo alado amamantando a su cría, una górgona rodeada de tres alas, de la primera mitad del siglo VI a. C. un Pegaso y una gorgona alada con parte de león y cola de pez, de la segunda mitad del siglo VI a. C.